Nobel de Medicina para Brunkow, Ramsdell y Sakaguchi

El Nobel de Medicina 2025 premia descubrimientos sobre el "freno" natural del sistema inmunitario, un avance crucial para tratar enfermedades autoinmunes y mejorar trasplantes.
Lead (5W, ~30 palabras):Mary Brunkow, Fred Ramsdell y Shimon Sakaguchi ganaron el Nobel de Medicina por descubrir las células T reguladoras, un mecanismo que previene que las defensas ataquen al propio cuerpo, clave en inmunología.
Premio Nobel de Medicina 2025: reconocen hallazgo clave en el control del Sistema Inmunitario
El prestigioso galardón fue otorgado este lunes a los inmunólogos Mary Brunkow, Fred Ramsdell y Shimon Sakaguchi por sus descubrimientos pioneros sobre la "tolerancia inmunitaria periférica", el proceso que evita que nuestras defensas ataquen por error a células y órganos sanos. Sus investigaciones, desarrolladas a lo largo de tres décadas, han proporcionado la base para entender y tratar una amplia gama de enfermedades autoinmunes, ha revolucionado los enfoques en inmunoterapia contra el cáncer y ha mejorado las perspectivas de los trasplantes de órganos. El Comité Nobel destacó el carácter "fundamental" de su trabajo.
Los científicos compartirán un premio de 11 millones de coronas suecas, equivalentes a aproximadamente 1,17 millones de dólares. El anuncio, realizado en Estocolmo, marca el inicio de la semana de los Premios Nobel 2025.
¿Qué es la Tolerancia Inmunitaria y Por Qué es Tan Importante?
El sistema inmunitario es nuestra defensa contra patógenos como virus y bacterias. Sin embargo, posee un desafío colosal: debe discriminar con precisión entre lo extraño y lo propio. Un fallo en este reconocimiento, donde las defensas atacan a las células del propio organismo, es la causa de las enfermedades autoinmunes, como la esclerosis múltiple, la diabetes tipo 1 o la artritis reumatoide.
Durante mucho tiempo, se creía que este "aprendizaje" ocurría principalmente durante el desarrollo de las células inmunitarias en el timo (un órgano del sistema linfático), en un proceso llamado "tolerancia central". El trabajo de Brunkow, Ramsdell y Sakaguchi demostró la existencia de un sistema de seguridad secundario y crucial fuera del timo: la "tolerancia inmunitaria periférica". Este mecanismo actúa como un "freno" constante, asegurando que las células T defensivas, una vez liberadas en el cuerpo, no se activen de forma descontrolada contra los tejidos sanos.
El descubrimiento de las células T reguladoras: el frenos del sistema inmune
La pieza central de este descubrimiento son las células T reguladoras (Tregs). Shimon Sakaguchi, entonces en la Universidad de Osaka, fue el primero en identificar y caracterizar este tipo celular único en experimentos con ratones en 1995. En sus investigaciones, observó que la eliminación de un subtipo específico de células T, que expresaban un marcador llamado CD25, provocaba que los ratones desarrollaran espontáneamente enfermedades autoinmunes. Por el contrario, la reinserción de estas células prevenía la enfermedad. Sakaguchi había descubierto a los "policías" internos del sistema inmunitario.
¿Cómo funcionan las células T reguladoras? Estas células actúan suprimiendo o apagando la actividad de otras células T efectoras que podrían reaccionar contra el propio cuerpo. Lo hacen a través de varios mecanismos, como la liberación de señales químicas supresoras o el consumo de moléculas esenciales para la activación de otras células T. Su papel es mantener la paz inmunológica y prevenir la autodestrucción.
La confirmación genética y su vínculo con enfermedades humanas
El trabajo de Sakaguchi sentó las bases, pero fue la investigación independiente de Mary Brunkow y Fred Ramsdell la que conectó directamente este mecanismo con enfermedades humanas. En 2001, mientras trabajaban para la empresa de biotecnología Celltech Chiroscience en Seattle, descubrieron un gen clave llamado FOXP3.
Sus investigaciones revelaron que las mutaciones en el gen FOXP3 son la causa de una rara y grave enfermedad autoinmune humana llamada IPEX. Los pacientes con IPEX sufren de múltiples trastornos autoinmunes desde una edad muy temprana. Brunkow y Ramsdell demostraron que FOXP3 es el "interruptor maestro" que controla el desarrollo y la función de las células T reguladoras. Una disfunción en FOXP3 implica la ausencia o malfuncionamiento de estas células, dejando al sistema inmunitario sin su freno principal.
Dos años más tarde, en 2003, Sakaguchi consolidó el panorama al demostrar que FOXP3 es precisamente el marcador definitorio de las células T reguladoras que él había estado estudiando, uniendo así los hallazgos en ratones con la patología humana. Este ciclo de descubrimiento—de la observación en modelos animales a la confirmación genética en pacientes—es un ejemplo paradigmático de la investigación traslacional.
Aplicaciones médicas y futuro de los tratamientos
El impacto de estos descubrimientos trasciende el conocimiento básico. Rickard Sandberg, miembro del Comité Nobel, destacó en una entrevista posterior al anuncio que este trabajo ha proporcionado un "nuevo asidero" para la medicina. Actualmente, hay más de 200 ensayos clínicos en curso basados en la manipulación de las células T reguladoras.
Las aplicaciones se dividen en dos grandes frentes:
Reforzar las Tregs: En enfermedades autoinmunes y trasplantes de órganos, el objetivo es aumentar la cantidad o la función de las células T reguladoras para suprimir respuestas inmunitarias indeseadas. Se están probando terapias celulares en las que se extraen Tregs de un paciente, se expanden en el laboratorio y se reinfunden para calmar la autoinmunidad. En trasplantes, esto podría reducir o eliminar la dependencia de inmunosupresores generalizados, que tienen efectos secundarios significativos.
Debilitar las Tregs: En el campo de la inmuno-oncología, el objetivo es el contrario. Algunos tumores son capaces de reclutar o activar células T reguladoras en su microambiente para "apagar" los linfocitos que podrían atacarlos. Por lo tanto, inhibir selectivamente la acción de las Tregs dentro de un tumor puede liberar al sistema inmunitario para que combata el cáncer de manera más efectiva, una estrategia que se está explorando junto con otras inmunoterapias.
Perfil de los galardonados
Shimon Sakaguchi (Universidad de Osaka): Profesor distinguido e inmunólogo japonés, ampliamente considerado el padre del campo de las células T reguladoras. Su trabajo inicial en los 90 sentó las bases conceptuales del premio.
Mary Brunkow (Institute for Systems Biology, Seattle): Investigadora especializada en genómica y enfermedades autoinmunes. Su co-descubrimiento del gen FOXP3 fue crucial para entender la base molecular de las Tregs.
Fred Ramsdell (Sonoma Bio): Asesor científico de la empresa biotecnológica Sonoma Bio. Colaboró con Brunkow en el descubrimiento de FOXP3 y ha continuado investigando en el campo de la inmunología.
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