Apendicectomía, posible aliado contra las recaídas de la colitis ulcerosa

Durante mucho tiempo, el apéndice se consideró un órgano sin función aparente.

No obstante, un estudio reciente publicado en The Lancet Gastroenterology & Hepatology cuestiona esta idea, sugiriendo que podría influir en las recaídas de la colitis ulcerosa, una enfermedad intestinal inflamatoria crónica que afecta de manera recurrente a miles de personas en todo el mundo y que actualmente no tiene cura.

La colitis ulcerosa provoca inflamación y úlceras en el colon y el recto, acompañadas de diarrea frecuente y dolor abdominal. Aunque los medicamentos ayudan a controlar los síntomas, los brotes pueden reaparecer en cualquier momento, afectando significativamente la calidad de vida de los pacientes.

Los investigadores plantean que este pequeño órgano, antes considerado vestigial, podría producir proteínas inflamatorias capaces de activar respuestas inmunitarias que desencadenan nuevos episodios de la enfermedad. “Cada vez hay más evidencia que apunta a su papel en la inmunidad intestinal y en el equilibrio del microbioma”, señala un comentario editorial que acompaña el estudio.

Para probar esta hipótesis, se analizaron 197 adultos con colitis ulcerosa en remisión y antecedentes de recaídas en el último año. Todos recibieron el tratamiento estándar, pero a la mitad se les practicó una apendicectomía, es decir, la extracción quirúrgica del apéndice.

Un año después, quienes se sometieron a la cirugía mostraron una reducción del 36% en el riesgo de recaída, mientras que en el grupo que solo recibió tratamiento convencional, la probabilidad de un nuevo brote fue del 56%. Además, los pacientes operados necesitaron menos tratamientos con agentes biológicos y reportaron una mejor calidad de vida.

Aunque se registraron cinco complicaciones postoperatorias —dos de ellas graves—, no hubo muertes. Tras evaluar los factores de riesgo individuales, los investigadores concluyeron que la apendicectomía disminuyó en un 35% la probabilidad de recaída.

“Esta reducción significativa sugiere que la extirpación del apéndice podría ser una opción viable para mantener la remisión en la colitis ulcerosa”, indicaron los autores. Actualmente, se realiza un ensayo clínico paralelo para determinar si la cirugía también podría beneficiar a pacientes cuya enfermedad no se encuentra en remisión, abriendo así una nueva vía de investigación en el tratamiento de esta condición intestinal.